Me he atrevido a escribir este artículo, tras hablar con muchas personas en consulta. Me han contado cuáles han sido sus motivos para acudir a sesiones psicológicas. Si te has preguntado cómo saber si necesito un psicólogo, con este post esperamos despejas algunas incógnitas.
La psicología es una ciencia que estudia la conducta humana, tanto interna (pensamientos) como externa (acciones), en relación a situaciones que se dan. Muchas personas piensan que al estar relacionada con experiencias individuales no puede ser una ciencia, pero la realidad es que sí lo es, ya que está catalogada dentro de las ciencias de la salud.
¿Qué ocurre en terapia del psicólogo?
La gente tiene “miedo” de los psicólogos. Algunas personas piensan, medio en broma, medio en serio, que somos capaces de leer la mente (ya me gustaría tener este súper poder, me facilitaría el trabajo en algunas ocasiones), o que vamos a intentar cambiarles toda su vida, cosa que de sólo escribirla me causa malestar. De hecho, en terapia de pareja, uno de los dos, muchas veces, piensa que voy a intentar cambiar al otro de tal manera que va a abandonar la relación.
Todo esto hace que venga a terapia mucha menos gente de la que piensa en acudir en algún momento. Las sesiones, de la manera que las concibo yo, van a servir, al principio, para conocernos, de tal manera que yo pueda saber qué es lo que te preocupa realmente, para después organizar las mismas con el fin de darte herramientas que te ayuden a tener un mayor bienestar, dependiendo de la situación que te preocupe.
¿Cuáles son los motivos más frecuentes?
He estado revisando los temas por los que más acuden las personas a sesiones. Si te sientes identificado con alguna de estas cosas puede que necesites acudir a sesiones psicológicas.
- Terapia de pareja: Es uno de los motivos más frecuentes. Hay muchos matrimonios o novios que tienen problemas, y que tras intentar solucionarlos sin ayuda deciden acudir a terapia. La mayoría de veces es porque se pelean constantemente, llegando a perderse el respeto; otras veces es porque uno de los dos miembros ha sido infiel y el otro ha decidido perdonarle; también puede ocurrir que la sexualidad en pareja no está siendo satisfactoria para alguna de las partes. Existen otras razones por las que las parejas acuden a sesión, no pienses que no, lo que pasa es que podría ser un artículo aparte.
- Ansiedad: Esta emoción está muy presente en la sociedad actual, y la gente acude a consulta cuando se da cuenta de que no la puede manejar. Se da en relación a problemas laborales o familiares; ante la posibilidad de sufrir cualquier enfermedad física; miedo ante algunas cosas, como pueden ser animales, transportes o a espacios abiertos; ansiedad por no poder soportar los síntomas asociados a la ansiedad; o por no saber relacionarse con otras personas, por miedo a lo que puedan pensar.
- Trastorno obsesivo compulsivo. Tienes un pensamiento repetitivo ante algo, de manera constante, sabes que no es cierto, que es irracional, pero no puedes eliminarlo de tu cabeza. Sólo desaparece el malestar si realizas una acción concreta, por muy extraña que pueda ser. Por ejemplo, me juzgo responsable de que a mi madre le pueda pasar algo y de manera constante pienso “Si pienso en que a mi madre le va a dar un infarto realmente ocurrirá”. Este pensamiento genera tanto malestar que de pronto me planteo que si salto tres veces no pasará. Cada vez el pensamiento es más recurrente. Se tiene que realizar la compulsión para frenarlo, de tal forma que a lo mejor ya hay veces que las personas, cuando acuden a consulta, no reconocen ninguna idea vinculada con su comportamiento.
- Depresión: Hay un porcentaje alto de la población española que vive un episodio depresivo, o que lleva años viviendo los síntomas de manera constante aunque menos punzante. Este motivo hace que las personas vengan a consulta. Quieren volver a sentirse con energía, tener ganas de vivir, disfrutar de sus relaciones sociales y recuperar la satisfacción por las diferentes actividades que se pueden dar.
¿Cómo se desarrolla cada sesión en la consulta del psicólogo?
Cada psicólogo tiene una forma y tiempo para desarrollar su terapia, así que lo que escribo en este artículo se corresponde únicamente a como yo concibo la psicología.
Tras varios años de experiencia, he visto que el tiempo de las sesiones tiene que ser de una hora, menos no se puede ver casi nada y más hace que la gente se desconcentre. Incluso puede ser que en la última parte de la terapia, por el cansancio psicológico, se encuentren peor. Organizando la terapia y sabiendo distribuir el tiempo en cada objetivo, sesenta minutos suelen ser los adecuados.
Las sesiones suelen darse semanalmente, pero en ocasiones las personas, por tiempo o por dinero, únicamente pueden venir una vez cada dos semanas. Si es así lo que hago es organizar mi propuesta terapéutica a sus tiempos. Eso sí, por experiencia, al principio, venir cada más tiempo hace que las personas se desconecten y no se consiga un buen ritmo de sesiones.
Las primeras sesiones servirán para que nos conozcamos mutuamente, porque la alianza terapéutica, la conexión entre las personas y los psicólogos, es la herramienta más necesaria para que una terapia funcione. Es importante que el conocimiento profesional sea amplio, pero que tú confíes en mí también es muy necesario. Las siguientes consultas las vamos a organizar para ir resolviendo objetivos concretos, hasta conseguir que desaparezca el malestar y tengas un nivel amplio de bienestar.
Espero que te haya ayudado para comenzar tu propio proceso.
¡Gracias por leerme!