La pareja se compone de un conjunto de características entre las que se encuentran los retos y las habilidades que las personas implicadas en la misma sientan que existe. Si tenemos la sensación de que el reto es pequeño, es decir que la pareja no invita al crecimiento, y las habilidades están desarrolladas, se puede llegar a experimentar aburrimiento y pensar que nuestra pareja no nos aporta lo que queremos. 
Si consideramos que el reto es demasiado grande, y las habilidades para resolverlo son escasas, puede producir ansiedad. En terapia de pareja se aprenderá a equilibrar ambas características: el reto y las habilidades. Encontrar este equilibrio supone que la relación debe ayudar a descubrir nuevas motivaciones para uno mismo y en la otra persona, a la vez que se van aprendiendo estrategias nuevas que serán las habilidades para resolver los problemas que se den en la pareja.
El plantearse nuevos aprendizajes y adquirir habilidades requiere que ambos miembros de la pareja se den atención para poder descubrir los pensamientos, sentimientos y motivaciones que puede tener la persona. Estos no son inflexibles e invariables, sino que se modifican con las experiencias tanto las individuales como las que se dan en pareja. Ser conscientes de esto va a ayudar a que sepamos qué retos se pueden vivir juntos, los que tenemos que vivir por separado, porque el objetivo de una relación sana y equilibrada es crecer, realizar cosas y actividades que ayuden a la pareja a plantearse retos y habilidades para seguir adelante.
A continuación os muestro algunas ideas para mantener viva la pareja:
- Ser activos en el crecimiento de la misma. Hay personas que tienden a dejarse llevar por la otra persona… Y de repente, tiempo después, se dan cuenta que no están tan a gusto en la relación como quisieran. Es importantísimo aportar a la relación y ser capaz de expresar tus deseos.
- Evitar los juicios sobre la otra persona… Si quieres mantener viva tu pareja es lo peor que puedes hacer. Señalar comportamientos concretos que os generen malestar es positivo y ayuda a saber más sobre el otro, pero convertirlo en características inflexibles no ayuda al crecimiento.
- Aceptarse mutuamente. Decir lo que te molesta está bien y ayuda al crecimiento, pero también es importante saber que la capacidad de aceptar a la persona que tienes enfrente facilitará la relación.
- Comunicar desde el “yo me siento” y no desde “el tú me haces sentir”. Si tienes que comunicar que hay algo que te incomoda hazlo desde la primera persona y siempre en positivo, ofreciendo una respuesta de cambio.
- Manifestar el amor y el bienestar por estar con el otro. Las caricias verbales, igual que las físicas, si bien no son necesarias son positivas para hacer crecer la relación. En terapia de pareja insistimos en la importancia de decirle todo lo positivo que piensas a la otra persona.
- Reconoce tus errores para poder poner en marcha estrategias de cambio que te ayuden individualmente y en pareja.
Si deseas reservar una cita con un psicólogo en Madrid para realizar terapia de pareja llámame al 605938878 o escríbeme a info@blancadelamo.es.
